El láser es una luz muy intensa, capaz de generar efectos muy definidos cuando reacciona con algún punto en el entorno. Se ha utilizado en múltiples aplicaciones dado que convierte la energía eléctrica en fuentes de alto rendimiento en labores muy específicas, desde la comunicación por fibra óptica hasta la manipulación de elementos celulares microscópicos.  

En medicina se ha aplicado desde pocos años después de haberse inventado. Su futuro es muy prometedor en todas las áreas de diagnóstico y terapéuticas.  

En la parte terapéutica la remoción más exacta de las lesiones, ha requerido siempre mayor selectividad del instrumento usado. La mano del cirujano tiene sus límites.

En la piel el panorama es muy amplio, dada su mayor oportunidad de exposición. Con varios equipos se pueden abordar las más frecuentes lesiones que se presentan en la piel como lo son el acné, los lunares, las verrugas, los tatuajes cosméticos y artísticos, las telangiectasias (venitas) en la cara y las piernas, los léntigos (manchas solares pequeñas de en la cara y dorso de las manos), las queratosis actínicas (lesiones que se observan de color rojo con escama muy adherente que sangran al rascarlas), tumores de la piel en general, poiquilodermia (cuello rojo, café, blanco) e hipertricosis (aumento de la población y grosor del pelo).

Las respuestas más favorecidas por los pacientes han sido las aplicaciones en depilación y en el envejecimiento cutáneo.  

Con la depilación prácticamente se solucionó el problema de la depilación femenina y de todas las dificultades que se asociaban a los métodos anteriores. Al respecto solo existen hoy en día dos problemas técnicos: Los problemas de quemaduras, accidentes o efectos colaterales relacionados con la utilización del instrumento por personas no calificadas y la limitación de los resultados de la depilación de pelo muy claro o muy delgado y profuso. Ya hoy todos saben que son muchas más de las 3 sesiones que anuncian en las propagandas para conseguir los resultados a largo plazo y que una vez la piel se observa sin folículos y sin pelos por más de 6 meses es muy poco el pelo que recrece. Y, si eso sucede… se soluciona con más sesiones.  

Con el envejecimiento de la piel se ha avanzado al punto de que es inaceptable para los pacientes que se le ofrezcan resultados con terapias de sacrificio que produzcan enrojecimiento prolongado de la piel, sangrado, dolor, incapacidad. Los pacientes hoy en día exigen eficiencia, confort y seguridad. El repertorio de láseres es considerable, se diría que todos podrían ser usados… la vejez es una batalla que se perderá en forma digna, sin tantas arrugas y sin manchas ni cánceres rondando la piel.  

En todos los demás procedimientos de la piel hay indicaciones de primer orden para el láser por encima de otras opciones como en la eliminación de los tatuajes, el tratamiento de los lunares congénitos, las resecciones de lesiones de piel de tamaño muy pequeño.

Son prometedores los resultados en manejo de cicatrices, acné, lesiones vasculares de la piel, trastornos pigmentarios de la piel, lesiones inflamatorias crónicas, cánceres superficiales y extensos.  

La adición de más repertorio en substancias fotosensibles en la terapia fotodinámica con láser, creará en el futuro más aplicaciones en terrenos vedados; pues optimizará la selección de las lesiones más ocultas y ahora inabordables.  

Por último es el hombre quien los maneja y debe cumplir dos condiciones: Experiencia y dedicación lo que se resumiría en una palabra la experticia, pues es la base para evitar catástrofes o respuestas a los tratamiento no adecuadamente pronosticadas.

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