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José María Gutiérrez Villá |
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Hay personas que piensan que los milagros eran una cuestión de hace muchos siglos, de cuando no se conocía nada, de cuando no había explicación para nada, porque era poco lo que se sabía o se había descubierto. Dice ese tipo de persona que lo que entendemos como "milagro" es algo que en verdad nunca existió, y que se extinguió en cuanto la ciencia avanzó y dio explicación a lo que se consideraban fenómenos y milagros. Ese tipo de personas son las que están convencidas de que cuando mueran se convertirán "en una piedra" o en algo similar, y no ríen cuando lo dicen, sino que lo mencionan con un total convencimiento que verdaderamente lo deja a uno pasmado. En mi propio caso yo ya conté en otro escrito (clic aquí para verlo) como pude yo mismo presenciar como brotaban del pasto rollos de billetes debajo de un árbol, y ese tipo de suceso, que yo llamo "milagro", no se encuentra registrado entre los milagros que ocurren en Lourdes, por ser algo excesivamente simple y sencillo, casi de espectáculo, pero en todo caso nada común, claro que no, porque serán muy escasas las personas que hayan visto brotar dinero debajo de un árbol, pero no es en forma alguna algo que en Lourdes le llame mucho la atención a las Juntas que estudian y analizan las miles de situaciones que las personas claman que son "milagro". Sin embargo, la ciencia, los avances de la ingeniería y de la ciencia en general, están a años luz de poder explicar por qué, cómo y qué tipo de persona es el que puede hacer que broten fajos de billetes del césped, de manera que yo puedo contradecir a los que se van a convertir en piedras, porque yo personalmente fui el beneficiario en la década de los años 70, sobre 1978, de ese..... "suceso", que no sabemos como ellos quieran denominar, pero que yo sin la menor duda califico de "milagro". |
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| NOVENA A JESÚS | |||
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La historia es como siempre, muy útil y práctica para ayudarnos a comprender lo que fácilmente no entendemos, y también para darnos una percepción más acertada sobre el tema que en ella estudiemos. Veamos lo que nos informa CRUZADA (dé un clic sobre Cruzada para ingresar a su website) acerca de Lourdes y conoceremos gracias a dicha información lo que son los milagros en el siglo XXI, contando hacia atrás sólo 150 años, pero prepárense porque vamos a ver..... un promedio de un (1) milagro por semana.... |
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"1.680
curaciones inexplicables en 150 años
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Dos hechos extraordinarios
sucedidos en Lourdes, el primero mucho antes de las apariciones, el
otro desde que ocurrieron hasta hoy, ayudan a medir su grandeza e
importancia. |
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En esa situación, cierto día una misteriosa águila pasó sobre el peñón llevando en sus garras una enorme trucha aún viva, que dejó caer dentro de la sitiada fortaleza. Mirat la recogió y aprovechó para enviársela fresca de obsequio a Carlomagno, diciéndole que era sacada del pozo de su castillo, para hacerle creer que tenía reservas de agua suficientes para soportar un largo asedio. El engaño surtió efecto y el emperador, casi desalentado, ya tendía a levantar el cerco. Pero su amigo y consejero Turpin, obispo de Puy, tomó la iniciativa de reunirse con el emir y le propuso que, puesto que no deseaba someterse al soberano francés, lo hiciera a la gran Señora de la cual éste era vasallo. Sorprendido por la propuesta, Mirat quiso saber quién era esa Señora tan extraordinaria, de la cual hasta el monarca supremo de la cristiandad se hiciera súbdito. El obispo le explicó que se trataba de la Reina del Cielo, y pasó a describirle los sublimes atributos de la Santísima Virgen. Maravillado con lo que oía y tocado por una gracia, el emir aceptó hacerse vasallo de Nuestra Señora y también cristiano. |
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Recibió el bautismo de manos del propio Turpin y tomó el nombre de Lorda (del cual deriva Lourdes), que significa “la rosa” en árabe. A su muerte designó a la Virgen María como única heredera de sus dominios. Lourdes pasó entonces a ser feudo dependiente del famoso santuario medieval de Nuestra Señora de Puy. Una lápida colocada en la base del actual castillo, erigido sobre las ruinas del primitivo, recuerda este maravilloso episodio. Curiosamente, el nombre de la gruta donde Nuestra Señora apareció, Massabielle, deriva también de una palabra árabe, que significa “la fuente”. Podemos relacionar esta toponimia con la de Fátima en Portugal, nombre igualmente árabe, tomado de una joven musulmana que en la Edad Media —cuando los mahometanos ocupaban una porción de territorio portugués— se casó con un caballero cristiano, abrazó la fe católica, y al fallecer fue enterrada cerca del local donde en 1917 la Virgen apareció a los pastorcitos. Estos hechos parecen indicar un misterioso nexo de Lourdes y Fátima con la futura conversión de los musulmanes, profetizada por tantos santos, como el gran apóstol mariano San Luis María Grignion de Montfort. El milagro en serie, preludio de una era Marial
Otra característica que hace de Lourdes
un hecho único en la historia de la
Iglesia es que, como bien lo señala
Plinio Corrêa de Oliveira, allí Dios “hizo
algo nunca antes visto: instaló
en el mundo el milagro, por así decir,
en serie y a título permanente”. Ya son
más de 6.800 las curaciones
extraordinarias de las cuales se tiene
registro desde 1858 (en
promedio, casi una por semana a lo largo
de 150 años). De esa
impresionante cantidad, 67 curaciones
han sido reconocidas oficialmente por la
Iglesia como milagrosas. Para recibir
ese reconocimiento se requiere que la
cura haya cumplido las cuatro
condiciones exigidas por la comisión
médica de Lourdes: 1) ser una
cura inmediata, 2) ser una cura
completa, 3) irreversible, y
4)
que científicamente sea
inexplicable. Es ese riguroso
atestado médico lo que verdaderamente
nos va a garantizar la autenticidad del
milagro. Hasta aquí lo que nos enseña la página Web de Cruzada, que les recomiendo especialmente visitar con solo dar un clic aquí, por lo mucho que podemos aprender de ella. No creo o no me parece que haga ya falta explicar o hacer más evidente que, en el siglo XXI los milagros continúan dándose sin cesar, y que el amor por cada uno de nosotros de la Santísima Virgen y por supuesto de Nuestro Señor, no tiene límites ni se agota nunca en quienes realmente los llevan a Ellos en su corazón, en su vida, en su mente y en su constante memoria, pero sobre todo, en su corazón. |
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